Arq. Vicente Vargas Ludeña
CARACTERISTICAS GENERALES DE SOCIOPATAS, NARCISISTAS,
Y SICOPATAS INTEGRADOS.- Son sujetos con estructuras generales distintas a las
normales a nivel de la corteza pre-frontal y solo son capaces de sentir muy
básicas (las asociadas al sistema límbico) como el odio, miedo y un deseo
sexual pronunciado. Todos ellos tienen muy desarrollado un sentido de
grandiosidad y se sienten superiores al resto de la humanidad. Estos comúnmente
llamados proto-humanos aprenden desde muy temprano que comportamientos
necesitan para obtener lo que quieren, estudian las emociones humanas como el
amor, el dolor, la simpatía para luego imitarlas a la perfección. Muchos de
ellos pueden mantener una máscara de cara dura por un periodo largo de tiempo
ya que pueden pasar sin ser detectados por los “radares humanos”. En el trabajo
suelen ser divertidos y sociables. Son los que parecen escuchar “lo problemas
de los demás” (pero realmente lo hacen para beneficios)
Este fragmento en negrillas
corresponde a un Enlace tomado de FACEBOOK.
Personalidades con
evidentes defectos físicos externos: congénitos o adquiridos, han sido objeto
de papeles estelares en la literatura de ficción; también en la cotidianidad,
así como en siniestros papeles históricos. Obviamente, también, en tiernos y
profundos sentimientos de solidaridad y afectos. En los momentos actuales, lo
hay, siempre los habrá. Es la condición
humana.
El prolegómeno de
esta reflexión describe teóricamente el fenómeno del conjunto de personas que
permaneciendo a nuestro lado no los hemos comprendido. Creíamos que eran
situaciones circunstanciales. Y no una condición de los denominados
proto-humanos.
En mi juventud universitaria,
tuve un compañero que había sufrido
de poliomielitis, en consecuencia caminaba “pateando las piedras”. Era de
compleja personalidad, desdeñaba lo que para los otros, nada afectaba; en
cambio, para él era una rémora. La sorna y la burla eran su talante. Debo aclarar
que era muy listo.
Víctor Hugo, poeta
dramaturgo y novelista dejo su huella dramática en “Nuestra Señora de Paris”,
protagonizada por QUASIMODO:
jorobado, tuerto, de rostro desgarrado, de aspecto esperpéntico; con una
cualidad hercúlea. Obligado por su mentor: secuestra a la bella gitana Esmeralda.
Es arrestado y vilipendiado por la multitud. En el patíbulo, cuando todo estaba
perdido; Esmeralda sube con un bote de agua a saciar la sed en los labios del
“monstruo”. La muchedumbre perpleja no comprende la escena. Quasimodo era en
verdad, un ser de una infinita ternura y solidaridad; La bella gitana se vuelve
huésped del contrahecho, en la torre del campanario de la Catedral, Nuestra
Señora de Paris.
EFIALTES, es
otra figura histórica en la línea de estos fenómenos proto-humanos. En la
película 300, lo personifican como un Quasimodo, sin la fuerza titánica de
éste; pero de una ambición por las riquezas, delirante. Su miserable aspecto
físico no despertaba en nadie y nunca los alcances de un TRAIDOR sin parangón. No tenía límites, carecía de cualquier
escrúpulo. Entregó al enemigo, con la traición a todo el ejército de la Nación
y a su Rey Leónidas. Cumple rigurosamente con el marco teórico arriba descrito.
Pero, dejemos a un lado la ficción y la historia. Hoy,
aquí, en la cumbre del poder político, tenemos la obra perfecta de la Psicópata
y Sociópata, simultáneamente. Tiene los estigmas corporales del proto-humano
como diseñado en arcilla. De repugnante escena cuando en cuadrilla deben
cargarlo para salvar un pronunciado desnivel. De inteligencia elemental y una
estructura amoral única en la historia de más de medio siglo en el Ecuador. UN
TRAIDOR PERFECTO. Diez años mascullando su siniestro Plan, en las mismas
entrañas del poder. Simulando compartir esperanzas y sueños junto a los
compañeros de la “minga nacional”. Su objetivo canalla, lo perfeccionó con conspicuos
equipos de felones como él; y delincuentes contumaces de la política nacional,
en conjunción con los banqueros, la CIA, el Departamento de Estado de los
Estados Unidos y la escoria de malandros bucaramistas y su luenga lista. Mucho
se ha dicho ya, de la calidad moral de este proto-humano. También del daño que
está causando en la sociedad y al País.
Mi compañero que al
caminar “patea las piedras”, Quasimodo una ficción, Efialtes un traidor de
alcurnia sin nombre; y Lenin Moreno ejemplifican con precisión, sin dejar un
renglón sin cumplir las patologías pertinentes al miserable juguete del trágico
destino. El último se encarna en la destrucción y desgracia Nacional contemporánea.
Todos cumplen los epistemes de las
ciencias que estudian estos monstruos.
Lo infame y fatal,
es que, unos son la condena de la moral ciudadana. Destruyen con sus taras la
vida los pueblos. Otros viven su vida acariciando sus sentimientos y emociones.