Arq. Vicente Vargas Ludeña
Lenin Moreno Garcés, la semblanza de tu “yo”: personal, político,
ético y demás valores que arquitecturan al ser; quedó reflejada en la I PARTE
de este opúsculo, o como quieras llamar a este rebelde y frustrante grito de
inconformidad, indignación de los que creímos que los senderos recorridos hasta
ahora en los últimos diez años, habrían de continuar. Más, tu conducta falaz y
traidora, está arrastrándonos por los precipicios del pasado en comandita con
toda la escoria política y humana que sacaste del infierno; y con ellos provocar
el caos perpetuo, que terminará devorándonos a todos. Tú, serás la primera víctima.
Lo merecerás, así lo desea la mayoría.
Revisa las advertencias del futuro que viejas figuras con algún
sentido de percepción que han pasado por la Presidencia, que han estado cerca
del poder…: la podredumbre de tus pasiones les llega a grandes distancias. Tus
limitaciones mentales, aúlicos que te pasan el cepillo diariamente, completan
el círculo infernal que te solazas en disfrutar con perversa moral y venganza
con el pasado.
Cuando abriste las puertas el infierno para que ejércitos de
demonios persigan y ultimen a Rafael Correa; demuestras el poco talento que te
acompaña. El inmenso odio que guardas te alienta a desquiciar todo lo que estúpidamente
te entregamos, con el poder. Las legiones de satanes que has liberado están dispuestos
a convertirse en émulos de tu personalidad misma; de tus planes y proyectos; y
de cobrarse la abstención temporal de sus ansias de poder para hacer lo que
siempre y lo único que saben hacer: depredar, atracar, destruir la incipiente y
soberana Nación que empezábamos a ser.
El festín recién comienza, y que lo has programado a la
medida de tus valores. “La Consulta” que tus aliados, con los que tendiste
puentes, inocularon la dosis de veneno, a la tuya, la otra porción que faltaba para demoler a
Correa. Y para barrer cualquier sombra de tu antecesor. Sacas de la chistera
los enclaves de los poderes institucionales que conforman un Estado; y regar a modo de
chagrillo desde lo que, luego, manejarás sin pudor: “El Consejo de Participación
Ciudadana y Control Social”. Te recuerdo, la ciudadanía debe conocerlo: ese fue un Regalo de las fuerzas
oscura salidas del averno: la derecha y toda la plebe de polticastros; que estarán
en la mesa del convite cuando repartas a retazos el poder.
Como puedes apreciar, los golpes políticos hasta hoy, impúdicamente
los vas sacramentando con tu firma sin pudor ni arrepentimiento. No Tú. Son los
aliados fachos que han salido airosos porque tus acciones están más cerca de lo
escatológico ético que de un Estado de Derecho que toda Nación aspira vivir.
Internacionalmente ya
midieron tu estura y capacidad de un modesto profesor de escuela o un capataz
contratado para controlar ingreso y salida de los jornaleros. No te miden como
un mandatario políticamente; lo interpretan como accidente. Tus posturas
morales son esperpénticas. Aquí, o en cualquier parte. Estamos más cerca
de África que de nuestra América.
Lo hasta aquí descrito, de los desastres realizados por las encomiendas,
u órdenes que la derecha daba a tu “mandado” –me abstengo de llamar gobierno-
son los prolegómenos del infierno que vendrá pronto, formado por esa amorfa masa de malandros y
hampones que has logrado aglutinar, no a tu alrededor, sino en pos del poder
total que buscan y aspiran.
Debes estar consciente que estas engendrando un monstruo –un Frankenstein-
que terminará tragándonos a todos. Solo
para recordar nuestra tragedia, y para que la refresques: Tú no puedes correr a
campo traviesa. Lucio, con sus destrezas militares, casi cae bajo la panza del helicóptero
que lo rescataba de la muchedumbre con sed de venganza por las trapacías, la
mediocridad, y sobre todo por TRAIDOR.
